“No basta con tomarle una foto al monumento destruido: hay que contarles la historia a los visitantes, hay que señalizar para que sepan dónde almorzar, cenar, descansar y también dónde hacer sus necesidades”
Turistas recibimos a diario en el puerto de Paita, pero no son “gringos” como los de la televisión y las revistas, tampoco traen dólares como muchos creen que suelen ser los turistas. La gente que nos visita a diario, pero que pasan desapercibidos por no llevar trenzas, mochilas gigantes y botas, pueden ser empresarios captando materia prima o que solo buscan conocer el puerto famoso y estratégico por donde pueden exportar e importar; también muchas familias de nuestros distritos que llegan los fines de semana para pasear y buscar la foto para las redes sociales; hay los que llegan de diferentes provincias para visitar a los amigos de antaño y familiares; algunos, los de lugares más alejados, simplemente, llegan para descansar de semanas agotadoras y estar cerca de las playas norteñas.
Turistas hay a diario en el puerto de Paita, pero la gente no los ve, no los siente y tampoco hace mucho o nada para que puedan llevarse un buen recuerdo de la visita. El turista no tiene un lugar donde estacionar su vehículo, por ejemplo, porque todo es línea amarilla, calles bloqueadas o agentes municipales amargados expulsándote. Nuestras autoridades tienen que ser conscientes de los beneficios que trae recibir visitas, y por eso es importante tener una planificación y una estrategia que mantenga una estadística actualizada de los visitantes para poder trabajar en el tema de la mejor manera posible. La gente puede ignorar a la visita, pero nuestras autoridades jamás.
No basta con tomarle una foto al monumento destruido: hay que contarles la historia a los visitantes, hay que señalizar para que sepan dónde almorzar, cenar, descansar y también dónde hacer sus necesidades.
Necesitamos tener visible una ruta por el centro histórico, o lo que queda de él. No es posible que en Paita hasta el desagüe sea más notorio que cualquiera de nosotros.